Imagínate esto: un día, después de una campaña exitosa, llegan 10 nuevos clientes importantes. ¡Un sueño hecho realidad! Pero al mes siguiente, tu equipo está al borde del colapso, los procesos internos no soportan la carga y la experiencia del cliente comienza a deteriorarse. El resultado: pierdes a esos nuevos clientes... y también a los antiguos.